Embarazo adolescente
Embarazo adolescente o embarazo precoz es aquel
embarazo que se produce en una mujer adolescente: entre la adolescencia inicial o pubertad –comienzo de la edad fértil– y el
final de la adolescencia. La OMS establece la adolescencia entre los 10 y los 19 años. La mayoría de los
embarazos en adolescentes son considerados como embarazos no deseados. En general el término también
se refiere a las mujeres embarazadas que no han alcanzado la mayoría de edad jurídica, variable
según los distintos países del mundo, así como a las mujeres adolescentes embarazadas que están en situación de dependencia de la familia de origen.
El embarazo en una mujer adolescente puede llegar a término, produciéndose el nacimiento, o interrumpirse por aborto, ya sea
éste espontáneo o inducido (aborto con medicamentos o aborto quirúrgico), en el
caso del aborto inducido de manera legal o ilegal
dependiendo de la legislación del aborto.
Determinación de la adolescencia y
embarazo adolescente
La edad media del período de la menarquía (primera menstruación) se sitúa en los 11 años aunque esta
cifra varía según el origen étnico y el peso.
El promedio de edad de la menarquía ha disminuido y continúa
haciéndolo. El adelanto de la fecundidad
permite la aparición de embarazos a edades más tempranas y depende por tanto no
solo de factores biológicos sino de factores sociales y personales.
Las tasa de adolescentes embarazadas además de
encontrarse en la misma situación que cualquier otra mujer embarazada deben
enfrentarse a una mayor desprotección, mayores preocupaciones sobre su salud y
su situación socioeconómica -de manera especial las menores de 15 años y las
adolescentes de países con escasa atención médica y nula protección social de
la adolescente embarazada-.
En los países desarrollados los datos de embarazos en la
adolescencia confirman una relación con los niveles educativos más bajos, las
mayores tasas de pobreza, y otras situaciones de inestabilidad familiar y
social.
El embarazo adolescente en los países desarrollados se
produce por lo general fuera del matrimonio y conlleva un estigma social en muchas comunidades y culturas.
Por estas razones se realizan estudios y campañas con el objeto de conocer las
causas y limitar el número de embarazos de adolescentes.
En países considerados en desarrollo o
subdesarrollados y en particular en ciertas culturas, el embarazo adolescente
se produce generalmente dentro del matrimonio y no implica un estigma social. La
percepción social del embarazo adolescente varía de unas sociedades a otras e
implica un debate profundo sobre aspectos del comportamiento, tanto biológicos como culturales relacionados con el embarazo.
Actualmente Ecuador cuenta con la tasa más alta de embarazos en
adolescentes de toda la región andina.
Según el Plan Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes (PNPEA,
2008) más del 20% de las adolescentes a nivel nacional son madres o están
embarazadas, con diferencias significativas según nivel de instrucción, etnia e
ingresos.
La mayoría de estos embarazos no son planificados o deseados. 10% de las
mujeres entre 15 y 24 años, que estuvieron embarazadas antes de los 15,
señalan que su embarazo terminó en un aborto.
Las consecuencias de un embarazo en la adolescencia son múltiples,
perjudicando las oportunidades de desarrollo personal y socio- económico.
País
|
||||
290
|
270
|
254
|
196
|
|
143,7
|
124,8
|
117,7
|
113
|
|
96,9
|
93,2
|
90,6
|
108
|
|
12,1
|
95,4
|
70,5
|
23
|
|
114,6
|
102,5
|
99,8
|
93
|
|
94,1
|
92,1
|
90,78
|
90
|
|
893,7
|
897,6
|
894,4
|
850
|
|
93,2
|
89
|
85,16
|
83
|
|
85,4
|
84,5
|
83,48
|
83
|
|
95,2
|
87,1
|
83,4
|
81
|
|
102,1
|
87
|
80,2
|
79
|
|
86,9
|
84,4
|
80,6
|
78
|
|
93,4
|
82,1
|
77,5
|
78
|
|
87,6
|
79,5
|
75,4
|
76
|
|
76
|
68,3
|
63,3
|
72
|
|
86,9
|
77,5
|
73,8
|
71
|
|
78,7
|
70,2
|
65,8
|
65
|
|
76,7
|
66,7
|
60,7
|
63
|
|
70,1
|
69,6
|
69,23
|
61
|
|
66,9
|
61,6
|
60,4
|
60
|
|
82,6
|
54,6
|
52,7
|
60
|
|
69,8
|
60,7
|
58,4
|
57
|
|
63,4
|
60,8
|
58,8
|
53
|
|
65,4
|
49,7
|
50,06
|
47
|
|
75,9
|
61,5
|
53,5
|
47
|
|
70,1
|
64,1
|
60,62
|
46
|
|
52,72
|
51,33
|
49,83
|
42
|
|
43,2
|
42,6
|
42,2
|
42
|
|
41,6
|
37,3
|
35,4
|
35
|
|
20,11
|
15,04
|
13,23
|
14
|
|
20,5
|
20,4
|
18,1
|
13
|
|
7,82
|
9,76
|
9,08
|
9
|
|
1,6
|
1,56
|
1,53
|
1
|
Causas del embarazo en la
adolescencia
En algunas sociedades, el matrimonio a edades tempranas y el rol de género que
tradicionalmente se asigna a la mujer, son factores importantes en las altas tasas de embarazo en la
adolescencia. Así, en algunos países de África subsahariana, el
embarazo adolescente se celebra porque es la prueba de fertilidad de la mujer joven.20 En el subcontinente indio, el
matrimonio en adolescentes y el embarazo es más común en las comunidades rurales
tradicionales, donde es apreciada una numerosa descendencia, en comparación con
la tasas de las ciudades.
En las sociedades donde el matrimonio con mujeres
adolescentes es poco frecuente, la causa fundamental de los embarazos en
adolescentes es la práctica de las relaciones sexuales de las
jóvenes sin métodos anticonceptivos por lo que
éstos embarazos pueden considerarse como embarazos no planificados o embarazos no deseados.18 35
Comportamiento sexual adolescente
Según la información disponible en el Guttmacher Institute, tener
prácticas sexuales a los 20 años se considera un hábito normal en todo el
mundo. En los países con bajos niveles de embarazo en la adolescencia no se
considera adecuada la maternidad prematura pero sí las relaciones sexuales entre los adolescentes por lo que
en estas sociedades se proporciona información completa y equilibrada sobre la sexualidad y se facilita la accesibilidad a
los métodos anticonceptivos.
Además de la práctica sexual deseada y consentida pero
practicada sin métodos anticonceptivos también
existen comportamientos sexuales no deseados por los adolescentes que pueden
contribuir a incrementar los embarazos no deseados. Así, un estudio de la Kaiser
Family Foundation en adolescentes de EE. UU. Concluyó que el 29% de los
adolescentes se sintieron presionados a tener relaciones sexuales, el 33% de
los adolescentes sexualmente activos creían que mantenían una relación en las
que "las cosas se movían demasiado rápido en el aspecto sexual" y el
24% declaraba que había "hecho algo sexual que realmente no quieren
hacer".
Varias encuestas han indicado que la presión de los compañeros
es un factor que alienta, tanto a las adolescentes como a los adolescentes, a tener
relaciones sexuales.
Asimismo el consumo de bebidas alcohólicas y otras drogas producen
una reducción en la inhibición que también puede estimular la
actividad sexual no deseada. Aunque esto fuera así, no se sabe si las drogas
mismas influyen directamente en los adolescentes en comportamientos sexuales
más arriesgados, o si los adolescentes que habitualmente consumen drogas son
más propensos a tener relaciones sexuales. Debe
advertirse que la correlación no implica causalidad.
El consumo de drogas y medicamentos que han mostrado
evidencias en su vinculación con el embarazo de adolescentes son: alcohol, y anfetaminas, (incluyendo MDMA -éxtasis-). Otras drogas y medicamentos que no tienen correlación -o es
muy escasa- son los opiáceos, como heroína, morfina, y oxicodona, de los que es conocido el efecto
directo en la reducción significativa de la libido. Parece que en la adolescencia el consumo de algunas de éstas últimas ha
reducido significativamente las tasas de concepción frente a las drogas como el
alcohol y la anfetamina. Las anfetaminas son ampliamente
prescritos para el tratamiento de TDAH. Los países con las tasas más altas de prescripción de las anfetaminas a
los adolescentes también tienen las tasas más altas de embarazo en la
adolescencia.18 37 40 41
Falta de información sobre métodos
anticonceptivos
Los adolescentes pueden carecer de información y
conocimientos suficientes sobre los métodos anticonceptivos o no tener
un fácil acceso a su adquisición. También pueden sentirse avergonzados tanto
para preguntar como para comprar anticonceptivos.38 42
En Estados Unidos las mujeres adolescentes sexualmente
activas que desean evitar el embarazo tienen menos posibilidades que las de
otras edades para el uso de anticonceptivos. Así, un 18% de las adolescentes
entre 15 y 19 años no utilizan métodos anticonceptivos, frente a 10,7% de
mujeres de 15 a 44 años.
En las adolescentes más del 80% de los embarazos no son deseados.44 Y más de la
mitad de los embarazos no deseados se producen
en mujeres que no usan anticonceptivos43 y la mayor
parte del resto de embarazos no deseados se deben al uso incorrecto de los
anticonceptivos. El 23% de las mujeres jóvenes sexualmente activas45 admitió
haber tenido relaciones sexuales sin
protección con una pareja que no utilizó un preservativo, mientras que el 70% de las
adolescentes
manifestaron que les daba vergüenza comprar preservativos o cualquier otro
anticonceptivo y también solicitar información a un médico.
En muchos casos se usan métodos anticonceptivos pero
de modo inadecuado. Muchos adolescentes sin experiencia puede usar el condón incorrectamente y las adolescentes
se olvidan tomar con cierta frecuencia los anticonceptivos orales. Las tasas de fracaso anticonceptivo (índice de
Pearl) son mayores en las adolescentes, especialmente en los pobres, que para
las usuarias de más edad.
Los métodos reversibles a largo plazo, tales como el dispositivo
intrauterino, el anticonceptivo
subdérmico, el parche anticonceptivo o
inyecciones de anticonceptivos inyectables combinados (p.e. Depo Provera), requieren la intervención del
usuario con menos frecuencia -una vez al mes a cada varios años-, y puede
prevenir el embarazo con mayor eficacia en mujeres que tienen problemas para
seguir las rutinas, incluidas las jóvenes. El uso simultáneo de más de un
método anticonceptivo disminuye el riesgo de embarazos no deseados, y si uno de
los métodos es de barrera (condón), la transmisión de enfermedades de transmisión sexual también se reduce.
La aprobación, por las autoridades sanitarias de
numerosos países, de anticonceptivos
de emergencia (Píldora del día después o píldora del
día siguiente, método de Yuzpe) incide de manera específica en la
reducción de las tasas de embarazos en adolescentes. Además de la denominada píldora del día después también ha
aparecido en el mercado la denominada píldora de los cinco días después (acetato de ulipristal). Estás
píldoras anticonceptivas de uso de emergencia, que pueden requerir o no receta
médica –dependiendo de los países–, no deben confundirse con la denominada píldora abortiva RU-486 o mifepristona, para la que se requiere
prescripción y receta médica y solamente puede usarse dentro de los 49 días
siguientes a la concepción.
Cabe mencionar que los padres no deben temer al
hablarles de sexualidad a sus hijos ya que es la mejor manera de prevenirlos y
apoyarlos, por que si ellos ya han comenzado una vida sexual con su pareja, a
veces en la escuela o medios fuera de casa se altera la información y no hay
nada como que alguien cercano a ti y de confianza les hable sobre esto; no solo
de los métodos anticonceptivos también de las ETS (Enfermedades de Transmisión
Sexual) y todas las ventajas y desventajas de embarazarse a corta edad.
Cuando un adolescente ya ha comenzado su vida sexual
intenta recabar información de todos lados, informarse ya que en muchos casos
sus padres no le han hablado de esto, por este motivo muchos jóvenes están mal
informados, y les da vergüenza o miedo preguntarles a sus padres. Por esto hay
que hacer incapie hacia los padres para que informen a sus hijos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario